ESTE

Foto Silvia y Celia

¡Qué difícil es escribir para una,

ni que esto fuera Fuenteovejuna!

Todo sea por seguir la saga familiar,

¡Allá voy…!

El Este a mí me llama,

sus amaneceres, sus atardeceres,

toda entera me engalanan.

El mar Mediterráneo me vuelve loca,

cuando en él estoy,

de felicidad me siento plena,

sus aguas me mecen y me transportan

a otra antigua época.

En ella yo nado entre delfines, ballenas,

caballitos de mar y bellas sirenas.

Me susurran historias al oído,

de tiempos muy remotos,

donde no había cosas materiales,

ni guerras, ni siquiera odio.

Donde todo fluía, de forma armoniosa,

el sol era el padre, la luna una rosa.

Por eso yo del agua no quiero salir,

me quedaría allí la vida entera a vivir,

pero debo transmitir toda esa sabiduría,

a niños y adultos, a mayores y a jóvenes;

para poder algún día poder fluir como entonces.

Estas bellas criaturas dicen que tengo algo especial,

no saben si es inocencia o simplemente bondad.

Dicen que algo en mi interior es mágico,

que me hace soñar como una niña,

en este mundo de adultos,

¡a veces se convierte en una pesadilla!

Que tengo un brillo especial en los ojos,

cuando a alguien yo ayudo

y que por vivir en un mundo mejor,

perdería hasta el orgullo.

En eso tienen razón,

disfruto tanto ayudando

que a veces me olvido de mí

y no se por dónde ando.

Pero atrás dejé los lamentos,

hace ya mucho, mucho tiempo.

Ahora quiero ayudar desde la alegría,

las ganas de vivir y la simpatía.

Rodearme de mis seres queridos

y como soy muy morruda,

de tan grandes amigas y amigos.

Y a esta bella tierra,

que aunque no me ha visto nacer,

la quiero y respeto de igual forma que a la mía,

con mucho cariño e infinito placer.

65043882b5366206bedc507ccacd937f

«El día que se me acabe la imaginación, le pediré consejo a un niño» (Autor desconocido)

FELIZ DÍA DE LA MUJER

thumbnail_SAVE_20190308_093532

Hoy día 8 de Marzo, día de la mujer celebramos,

a la calle salimos entre gritos, vítores y cantos.

El mundo queremos cambiar

y a la mujer un papel más importante le queremos dar.

Eso está genial y honro a todas las mujeres,

que por ello han luchado y hasta su vida, han dado.

Pero hoy en día, esa lucha debemos cambiar,

pues la violencia no es buen consejero,

sirve para generar más violencia

y tan sólo es pájaro de mal agüero.

Los cambios en nosotras debemos empezar,

la construcción de una sociedad mejor y más igualitaria,

es un gran reto y la pregunta del millón sería:

-«Pero, ¿por dónde empiezo?»-

Pues puedes empezar con la educación y el respeto,

honrando a todos tus ancestros,

respetándote a ti misma y a los de tu entorno,

educando con cariño y equidad,

todos somos iguales y necesarios,

pues mujeres sin hombres no existirían,

y hombres sin mujeres tampoco acertarían.

En unión, todos juntos, con pequeñas acciones,

y un futuro en común, lleno de esperanza e ilusión,

podemos ser el ejemplo de una nueva forma de ver la vida,

un futuro diferente, donde todos tenemos algo que aportar,

tan especial y único, como la más variada diversidad.

Así que, sería algo maravilloso,

que a partir de este día,

todos nos volviéramos un poco más comprensivos y bondadosos.

Darnos la mano, ayudarnos,

sonreírnos y respetarnos.

Si ese día, nuestros hijos o nietos  lo logran ver,

yo personalmente me daré por satisfecha,

por nuestro buen hacer y mejor cosecha.

Y colorín, colorado,

este cuento se ha acabado,

espero haber tocado alguna conciencia,

o ayudar a que los cuentos sean diferentes,

que esta vez comiencen por:

-«Érase una vez una niña/un niño corriente,

que en su casa feliz vivía,

jugaba mucho con sus padres

y con pequeñas cosas, se divertía,

pues tenía lo más importante:

-cariño y atención,

paciencia e ilusión.

Y teniendo estas cosas tan básicas,

todo lo demás, ello sólo llegaría…»

taller_oct

 

 

 

 

LO QUE NO QUIERO PARA SAN VALENTÍN

thumbnail_FB_IMG_1549975036377

Para San Valentín, no quiero rosas,

deseo ver cómo florecen en el campo esplendorosas.

Ni tampoco quiero joyas caras,

sólo bañarme en un río y disfrutar de sus cascadas.

No quiero falsas promesas de amor,

me conformo con unas bellas palabras que salgan de tu corazón.

No necesito una fecha señalada,

si estoy a gusto contigo,

en este día no me apetece una comilona,

me da igual comerme una ensalada.

Disfrutar de tu compañía, yo únicamente te pido,

que aquella persona de la que me enamoré,

me la vuelva a traer Cupido.

Una relación sana, sincera,

cariñosa y verdadera, yo simplemente anhelo.

¡Qué sigas haciéndome reír, sí, muchooo

hasta que se me salte el braguero!

Y que podamos disfrutar de la vida.

de todas sus bondades,

que tenemos mucho que agradecer, mucho

y a veces se nos olvida o lo damos por hecho.

Así que, de aquí en adelante,

te propongo que hagamos un trato:

-No pienses sólo en esta fecha,

para acordarte de que existo.

Piensa en mí los otros 364 días,

sí, cada día tan sólo un poquito-

Vamos a dejarnos de rutinas y de miserias,

salgamos a bailar o a pasear, aunque sea.

Disfrutemos de esta vida tan bella,

de sus radiantes amaneceres,

o de esas puestas de sol,

que son verdaderos placeres.

Cojámonos de la mano,

dejando latir nuestros corazones,

leamos poesía o hartémonos a bombones.

Recuerda el niño pequeño que fuiste,

alegre y jovial,

que yo recordaré a mi princesa,

desgarbada y especial.

Y juntos volvamos a jugar,

a crear castillos de arena,

o hacer pompas de jabón,

algo… lo que tú quieras,

que nos recuerde que vivir,

simplemente, vale la pena.

Olvidemos el pasado,

pues sólo nos queda el presente,

piensa que los años se consumen

y se marchita hasta la mente.

¡Démonos otra oportunidad,

de poder esta vida saborear!

Yo me cuido y me pongo guapa,

y tú me dices:

-» ¡El frotar se va a acabar!»-

Empecemos hoy desde cero

y con nuestro amor,

recorramos grandes distancias,

los límites de nuestra vida

y por qué no,

el mundo entero.

thumbnail_FB_IMG_1549835255865

 

 

OESTE

IMG-20171104-WA0002

Eloy (Chache para mí),

siempre fiel y bondadoso,

eres un gran padre,

afectuoso y responsable esposo,

un hermano muy especial

y un hijo maravilloso.

Dotado de un extraordinario corazón,

una bella persona, con infinito tesón.

El poder de reinvención fluye en ti cuál ciclón.

Entre tus máximas están:

«Al mal tiempo, buena cara.

¡Qué más da el qué dirán!

Haz el bien y no mires a quién…»

Todo lo bueno que tú practicas,

vuelve a ti de una forma sosegada y pacífica.

Tu camino tienes claro

y sin duda alguna,

con gran esfuerzo y mucha pasión,

tus sueños se harán realidad

y algún día, la docencia realizarás.

Unos valores atemporales posees,

y por eso, en otra época te ubico,

cabalgando a la vera del mismísimo Cid Campeador,

luchando por una buena causa,

con mucho anhínco y enorme valor.

La música corre por tus venas,

con alegría y tu teclado en mano,

montas una «fiestuqui», un musical,

o sacas de la chistera una obra teatral.

50 años cumples,

por cierto, muy bien llevados,

a tu lado estamos toda tu familia,

que te queremos un montón,

hoy aprovechamos para brindar por ti,

por tu especial día, por tu belleza,

te mandamos todo nuestro amor,

te lo digo de corazón.

Por último y ya para despedirme, te digo:

«¡Viva la madre que te parió,

bendecido tú estás desde que naciste,

sé feliz y disfruta de la vida

y ojalá todo lo bueno que está por venir,

te pille con una gran sonrisa!»

 

Con tu admirado Elton John y como no, con su música, hoy te quiero homenajear:

THIS IS YOUR SONG

«How wonderful life is while you are in the world»

¡¡Te quiero, hermano!!

Un beso gigante desde mi humilde blog.

Silvia.

CONFIDENCIAS DE UN CENTENARIO

 

73ec8a09d5f8c3c07ed099341d5b31d7

Caen las hojas en otoño,

caen al ritmo de mi melancolía,

unas caen lentas, suaves, acariciando la brisa,

otras como un guiño, pasan casi desapercibidas;

bailando al mismo compás con el viento, se precipitan la mayoría.

Tonos anaranjados, ocres, rojizos y amarillos,

los vislumbro cual paleta de colores.

El verano, ¡Cómo lo echo de menos!

Con su sol radiante y sus maravillosos olores,

con la alegre algarabía de los pájaros

y cómo no, con sus brillantes flores.

Ahora es tiempo de recogimiento,

de mirar hacia adentro,

de soltar todo aquello que ya no sirve,

y poder coger fuerzas,

para soportar el duro invierno.

Cuando miro a mi alrededor,

la mayoría de mis camaradas ya están desnudos,

menos mal que algunos nos resistimos,

llevando la contraria, simplemente siendo diferentes,

dando al paisaje, de verde esperanza unos toques.

Aquel pino de allí,

también es de los míos,

Se muestra desafiante y altivo,

y soporta bien el frío.

Qué efímera es la gloria

y qué pena me da el pobre,

cuando lo pille la procesionaria,

no va a dejar nada de esa mole.

Esa oruga pequeña y silenciosa,

va ascendiendo por su tronco,

muy lenta y sigilosa.

Cuando consigue alcanzar su pequeño-gran objetivo,

echa un ovillo como si una merina fuera,

le chupa la savia, las entrañas,

no deja un ejemplar vivo.

Cuál parásito indestructible,

le da igual la altura, el tamaño o el grosor,

aquí caen tanto grandes como pequeños,

los corta como un serrucho demoledor.

Sin ruido, sin apenas movimiento,

en su interior, todo queda destrozado.

Yo les oigo agonizar

y me gustaría poder ayudarles,

pero estoy tan cansado

y pesan tanto mis anillos y ramas,

que ni decirles si quiera, puedo palabras.

Hace tiempo que vivo por vivir,

pero aguanto porque sé que de mis frutos sacan algo maravilloso,

el oro líquido, ellos le llaman,

y que aquí en el Mediterráneo,

lo venden a precio de oro como si fuera una tisana.

De él mil recetas han sacado,

y dicen los entendidos,

que tomarlo mejora su salud

y les encanta desde al pequeño agricultor,

hasta a el gourmet mayor.

Pero a mí no me tratan como tal,

cuando me varean me duelen las ramas,

van a destajo y todo les da igual,

se creen que por ser un árbol no merezco ningún mimo ni cuidado;

Que de cualquier manera pueden tratarme,

no se dan cuenta de que si fueran más delicados conmigo,

yo les daría mis aceitunas

más grandes y más bonitas,

sin necesidad de tanto movimiento ni de tanta maquinita.

Mira que cuando están cerca, se lo intento comunicar,

les mando una paloma mensajera,

¡Sólo le falta el sobre, de verdad!

Pero ellos están ciegos y sordos,

sólo quieren el máximo beneficio,

como si yo o cualquier otro,

fuéramos acaso su piso.

¡No soy de su propiedad,

y la naturaleza no es de nadie!

Sólo estamos aquí de forma desinteresada,

la tierra nos ha parido para tener con ellos un detalle;

sobre todo con los más pequeños,

para que el día de mañana,

no existamos sólo en sus sueños.

Suerte van a necesitar,

pues cuando esos pequeñines crezcan,

no sé si quedaremos árbol alguno en pie,

o algo que a una planta se le parezca.

Echo de menos a sus antepasados,

que utilizaban los recursos justos

y cuando te querías dar cuenta,

te habían colgado una prenda,

o a tu lado algo maloliente habían plantado.

Supongo que esta melancolía,

viene de los años que ya me pesan;

centenario olivo dicen algunos que soy,

aunque yo ya he perdido la cuenta.

Siento que ya no tengo fuerzas,

de vivir más estaciones,

no quiero ya ni dar frutos

ni aguantar muchos más sermones.

Sólo quiero fundirme con la tierra,

en una chisporroteante hoguera,

escuchar el sonido de gaitas

y que dancen a mi alrededor las meigas.

Asi que a esa malvada procesionaria,

voy a mandarle una paloma mensajera,

con mi nombre y dirección

y hasta mi mail si ella lo quisiera,

para que no se equivoque de árbol,

y que por favor venga a mi derrededor,

y en vez de atacar a esos pequeños pinos,

tan tiernos e indefensos,

les deje de una vez en paz

y que se cebe conmigo,

yo le doy todo mi tronco enterito.

Le cedo toda mi savia,

y a cambio sólo le pido,

que  me de otro destino,

donde pueda descansar,

al final de mi camino.

11

NORTE

20170727_085255

«Encarna,

fantástica hermana,

no hay nada que se te resista,

tan pronto tejes una bufanda,

como cocinas una tarta de manzana.

En tu mundo no existe la pereza,

ni en tu vocabulario la palabra “no puedo”,

eres un ejemplo de perseverancia y tenacidad;

Y si para ayudar a alguien a la luna hay que ir,

no te lo piensas ni un segundo y allí te marchas,

sin ni siquiera pasar por la estación espacial.

Tu mirada al frente, siempre valiente,

en la playa te encanta estar, da igual al norte que al este,

mientras tengas mar, lo demás puede esperar.

Cuando en ella estás, te fundes con la brisa,

te metes en el agua y por las olas te dejas acariciar.

En una etapa fabulosa entras,

no mires la edad, ni esas pequeñas imperfecciones,

la verdadera belleza es la que está en nuestros corazones.

Mira a tu alrededor y déjate querer,

pues los demás deseando estamos,

de darte un fuerte abrazo, tirarte de las orejas;

¡¡Desearte muy Feliz Cumpleaños,

decirte lo mucho que te queremos!!

En este día tan especial

y el resto de los días por igual.”

cumple

¡Esta entrada se la dedico a mi querida hermana Encarna en el día de su cumple con todo mi cariño! 253253018008212.png

RELOJ DE CAMPANA

 

downloadfile

«Reloj de campana,
tócame las horas;
Reloj de campana,
tócame las horas;
Para que despierten
las mujeres todas;
Para que despierten
las mujeres todas;
Porque si despiertan
todas las mujeres;
Porque si despiertan
todas las mujeres;
Irán recobrando sus grandes poderes,
irán recobrando sus grandes poderes.
Reloj de campana,
tócame deprisa;
Reloj de campana,
tócame deprisa;
Para que despierten las sacerdotisas,
para que despierten las sacerdotisas.
La que invoca el cielo,
la que invoca el agua,
la que invoca el fuego,
la que invoca el viento,
la que lleva a ofrendas a su tierra madre,
la que lleva a ofrendas a su tierra madre.
Porque de sus hijas necesita,
porque de sus hijas necesita;
Que canten y dancen llenas de contento,
que canten y dancen llenas de contento;
Invocando siempre a los cuatro elementos,
Invocando siempre a los cuatro elementos.»
¡Feliz Domingo y dulces melodías! 🌠

LA NOCHE DE SAN JUAN

xana,mitología leonesa

En la Noche de San Juan,

a la fiesta del pueblo voy a acudir,

honrando a mis ancestros,

llevo en mi mochila,

ganas de cantar, bailar y reír.

Primero a enramar la fuente y dejarla preciosa,

las mozas del pueblo nos vamos a reunir,

para que la Xana que en ella habita,

se sienta toda una princesa

y al Cuelebre que la anduvo reteniendo,

en contra de su voluntad,

le regale un juego de ordenador

y en vez de dedicarse a secuestrar bellas Xanas,

se haga un i-huerto

y se dedique a recolectar i-manzanas.

Más tarde a la plaza del pueblo nos dirigiremos,

a quemar trastos viejos en la hoguera,

para purificarnos y hacer sitio

y poder cumplir nuestros más dulces sueños.

Danzaremos emulando a los planetas,

en círculo, en espiral,

¡qué más da, allí cada uno lo hace

como le sale del costal!

Y a ver si al finalizar la noche,

un trébol de cuatro hojas,

o a la Xanina me encuentro

y sinceramente le canto:

-«Sal, Xanina, sal,
toma de la mi pobreza
y dame de la tu riqueza»-*

Que me de mucha suerte, suertuda,

no como a la última moza,

que como no sabía qué pedir,

se encontró con la mujer barbuda.

Y con sentido del humor

y enorme esperanza,

aguardo a partir de esta fecha tan señalada,

un año muy próspero

y lleno de felicidad,

donde haya buenas cosechas

y podamos vivir en libertad.

laxanabynr

*(Desde aquí quiero agradecer a la web http://www.senderismoenasturias.es  y a su autor, Javier Fernández-Pello García, por toda la información sobre esta fiesta tan popular en el Principado de Asturias y la foto de pie de página.)

 

 

LA LEYENDA DEL COLIBRÍ

a43c15561fdcc2c73ff8175fc7051f96

Cuenta una antigua leyenda guaraní que:

«Una vez se desató un enorme incendio en la selva.

Todos los animales huían despavoridos en dirección contraria al incendio, todos, menos el pequeño colibrí, que en lugar de alejarse de éste, iba y venía.

En un principio los animales no repararon en él, pero al verlo repetidas veces volar sobre sus cabezas en ambas direcciones, el jaguar decidió preguntarle lleno de curiosidad.

-¿Qué estás haciendo, colibrí?-

-Voy al lago, cojo agua con mi pico y vuelvo para arrojarla al fuego y apagarlo,- contestó el ave.

-¿Estás loco, crees que tú sólo, con tu pequeño pico vas a poder apagar este enorme incendio?- le increpó el jaguar.

-Bueno-, respondió el colibrí, -yo sólo hago lo que puedo- y sin más, reinició su vuelo y volvió a dirigirse al lago a por más agua.»

¿Qué tal si de vez en cuando, nos convertimos en pequeños colibrís?

dcf8c3fbfc5c58d453a5ed7c2ceeca52

 

 

EL EFECTO DOMINÓ

7776b9875632f75289493d47e0152c5e

Esa noche me acosté pronto porque estaba un poco cansada.

Además las noticias me aburrían, siempre noticias tristes, negativas, catastróficas…, estaba hasta las narices de tanta negatividad, ¿es que no habría noticias buenas alrededor del mundo?

¿O simplemente nos querían mostrar que vivíamos en un caos y no había otra salida más que el sufrimiento, la pena e ir siempre «con la escopeta cargada» (a veces, por desgracia, literalmente)?

Pues yo me negaba, sentía que algo en mí, e incluso en la sociedad estaba cambiando y no sólo lo sentía, sino que estaba viendo pequeños detalles que me lo confirmaban.

Uno de esos detalles ocurrió esa misma mañana cuando estaba esperando el tren en la estación de Atocha para ir a Guadalajara.

Cerca de mi había una señora de mediana edad con una maleta inconmesurable, de esas que llevas cuando te tienes que marchar de tu país y meter todas tus pertenencias e incluso tu vida entera en una sola maleta…

El caso es que cuando ya el tren iba acercándose y por fin paró, un chico de unos veintitantos años, con la cabeza rapada y lleno de tatuajes, se acercó a la señora y tras decirle unas palabras, le subió la maleta en un abrir y cerrar de ojos.

Una vez se la acomodó en su sitio, él fue a sentarse a otro sitio, sin más rodeos ni publicidad.

Fue un gesto tan genuino, amable y desinteresado que me tocó la fibra.

Quedé tan impresionada, perpleja y con una sensación tan difícil de explicar, que sentí cómo en mi interior se soltaba un resorte invisible.

Fue tanto, que cuando llegué a mi destino pensé en qué podría hacer yo para parecerme a ese chaval.

Y casualmente, había una chica con un carrito de bebé bastante aparatoso a mi lado dispuesta a bajar, asi que ni corta ni perezosa decidí imitar al «héroe» anónimo.

Primero de todo, le pregunté a la chica si necesitaba ayuda, pues nunca sabes si la gente va a dejarse ayudar o no y al decirme que sí, le ayudé a bajar a ese bebé al andén del tren.

Una vez abajo, sentí una sensación tan buena y tan placentera por el simple hecho de haber ayudado a alguien, que entendí perfectamente al chaval apenas hacía una hora en la estación de Atocha.

¿Y si cada uno de nosotros hiciéramos un pequeño buen gesto al día, a la semana o al año, dentro de nuestra capacidad y posibilidades? De forma desinteresada, con desapego y sin fijar ningún objetivo ni pretensión, seguro que acabaríamos viendo una realidad diferente y no sólo eso, sintiéndonos que formamos parte de un mundo mejor.

¡Porque si uno cambia, aunque sea una pequeñísima pieza del dominó, quizá pueda mover el dominó entero!

 

Esa noche me olvidé por completo de las noticias de la tele y en su lugar tuve una sensación de paz y tranquilidad y eso me produjo un sueño agradable y reparador.